En
torno al Proyecto de Innovación Educativa en el que estamos trabajando, surgen
informaciones que sorprenden por la lógica aplastante que aportan a
comportamientos habituales en algunos de nosotros y que nadie nos había
explicado.
Ya había escuchado hablar del cerebro
reptiliano, pero desconocía como era capaz de inhibir el aprendizaje bajo
determinadas circunstancias.
Según
Paul MacLean, del Instituto de Salud Mental de Estados Unidos, en nuestro
cerebro podemos diferenciar tres partes: Cerebro
Reptiliano, Cerebro Límbico y la Corteza Cerebral.
El Cerebro Reptiliano, incluye el Cerebelo,
se llama así porque las reacciones que controla son semejantes a los reptiles;
abarca todas las conductas instintivas, mecánicas, enfocadas a la
supervivencia. Es responsable de comportamientos como la formación de hábitos y
rituales, agresividad y reacciones de hostilidad, así como la habilidad física
en todas sus formas.
Cuando el cerebro reptiliano capta peligros
o dificultades reacciona exigiendo mayor cantidad de flujo sanguíneo, entonces
los otros dos cerebros disminuyen sus funciones para aportar al reptiliano la
sangre requerida, pues las exigencias de supervivencia siempre tendrán
prioridad. Esto tiene enorme
implicaciones en el aprendizaje. Procesos intelectuales como la captación,
memoria, evaluación, solución de problemas y creatividad se minimizan para que
la fuerza física y la rapidez de reacciones biológicas se incrementen. El
cerebro reptiliano es el más rápido en sus reacciones, diseñado para la defensa
instantánea ante cualquier ataque o amenaza.
Teniendo en cuenta como reacciona es
conveniente propiciar un ambiente de aprendizaje (aulas, tareas, exámenes) tranquilo,
libre de amenazas y molestias físicas extremas. La relajación consciente, la
música barroca, un sano sentido del humor, un ambiente pacífico son
fundamentales para que no se activen procesos de rechazo o defensa, de forma
que el cerebro reptiliano permita funcionar adecuadamente a los “otros
cerebros”
¿Recordáis
cual fue la peor época en la carrera deportiva de Nadal? … Efectivamente,
coincidió con la separación de sus padres. Uno de sus pilares se tambaleó y
afectó directamente al desempeño de su profesión.
¿Os
imagináis como afecta una situación de divorcio a los hijos en edad escolar?,
¿Cómo puede un niño, a veces utilizado como arma arrojadiza por los padres,
continuar con su desarrollo intelectual? En estas situaciones hay alguna
receta: separar los asuntos de los padres de la relación con los hijos y dar todo
el amor del mundo para que el hijo sea capaz de mirar hacia delante, sin
sentirse responsable de los asuntos de los padres. El amor entre los padres es
un misterio para los hijos, de igual forma la ausencia de amor no debe
mezclarse con ellos, no les corresponde.
Nota: Los
párrafos en cursiva has sido obtenidos del libro “El universo de la
Inteligencia” del Dr. Isauro Blanco.
Elvira Pérez Rueda
Descubriendo lo profundo de las personas
0 comentarios:
Publicar un comentario